CEDRO y OIM promueven estilos de vida saludables e inclusión social con el proyecto “El balón no tiene fronteras”
La práctica del Kickingball, uno de los deportes más importantes para la comunidad venezolana y que fusiona el béisbol con el fútbol en una misma disciplina. Ha llegado al Perú como una herramienta deportiva que promueva la integración entre niñas, niños y adolescentes peruanos y extranjeros.
La inclusión social es interseccional cuando hablamos de la equidad de género. Es por ello que a través de sesiones socio deportivas y actividades de integración comunitaria, la propuesta impulsada por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) e implementada por la ONG CEDRO, promueve la cohesión social entre la población refugiada y migrante venezolana con la población peruana. “El Balón no Tiene Fronteras”, se viene desarrollando en el distrito de San Martin de Porres en la zona de Vipol. Sus actividades están orientadas a fortalecer las habilidades sociales y deportivas de niños, niñas y adolescentes de dicha comuna. Es así como se promueve la integración, respeto y tolerancia por la diversidad cultural y de género, así como el apoyo mutuo.
Con la finalidad de promover la cohesión social y la integración entre la comunidad peruana y venezolana, las y los niños y adolescentes que habitan a los alrededores de la zona participan junto a los líderes comunitarios y el Consejo de Residentes en las diversas actividades, que se desarrollan semana a semana. La práctica del Kickingball, deporte que fusiona el béisbol con el fútbol en una misma disciplina, además, el básquet y el fútbol mixto son las herramientas deportivas con las que la integración resulta exitosa.
“El equipo implementador y los colaboradores resaltan y agradecen la presencia constante, puntual y animada de los núcleos familiares, la demostración de una convivencia pacífica y armoniosa y la capacidad de estar dispuesto a aprender y a integrarse entre todos y todas”, refirió Carola Sirvas, coordinadora de “El Balón No Tiene Fronteras”. De esta manera, el equipo de CEDRO y la OIM seguirán potenciando la unión, respeto, empatía, interculturalidad e igualdad de género para más peruanos y extranjeros. Este proyecto se desarrolla en el marco del Plan Regional de Respuesta de Refugiados y Migrantes de Venezuela (RMRP) y en concordancia con la agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible-Objetivo “Reducción de las desigualdades”.
